harto en el atardecer
cuando la locura me ha abandonado,
y recorro lo que no dije por
timidez
acompañado por un viejo bolero
la polera al revés
la manta que me abraza deslizándose doblemente en esa mano
mientras el perro negro finge dormir
he cerrado párpados
para no caer en la impureza de arrojarme
a la misma boca que llevo .-